Aquella mirada perdida se cruzó con un cartel que decía...
"Cuánto valen tus segundos... Yo te los compro todos..."
Dejó que pasasen tres ó cuatro instantes... Y con esa voz susurrante con la que siempre buscaba embelesarte, te dijo...
"Espérame aquí... Seré rápido... Diremos que nunca me viste llegar.. Que ya estábamos allí...
Déjame llevarte a ese lugar construído por los dos entre silencios... donde yo ya resido desde hace un tiempo...
Un lugar perfecto, donde sólo me faltas tú... Quizá volvamos tan tarde...
No hagas maletas... Perdamos los viejos años entre las vías de aquel tren...
Porque cada año que pasa sin ti es un robo que le hacen a mi corazón...
Y no quiero que este año, todavía adolescente, me vuelvan a robar..."
"Cuánto valen tus segundos... Yo te los compro todos..."
Dejó que pasasen tres ó cuatro instantes... Y con esa voz susurrante con la que siempre buscaba embelesarte, te dijo...
"Espérame aquí... Seré rápido... Diremos que nunca me viste llegar.. Que ya estábamos allí...
Déjame llevarte a ese lugar construído por los dos entre silencios... donde yo ya resido desde hace un tiempo...
Un lugar perfecto, donde sólo me faltas tú... Quizá volvamos tan tarde...
No hagas maletas... Perdamos los viejos años entre las vías de aquel tren...
Porque cada año que pasa sin ti es un robo que le hacen a mi corazón...
Y no quiero que este año, todavía adolescente, me vuelvan a robar..."
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