Al zar lo que es del zar

Normalmente asocio las canciones con sus momentos, con lo que siento en el instante (o instantes) en que la escucho, con el clima, con la luz... en definitiva con todo el contexto que las rodea...

Igual me ocurre con los ruidos.. Hay ruidos que me generan una serie de sensaciones más o menos agradables... Llamadme extraño, pero el ruido del camión de la basura y el de ese camión que limpia las calles con agua (¿tendrá nombre propio?) son ruidos que me relajan y mucho... Me recuerdan a la noche, a esos momentos previos a caer en dulces sueños (o amargos, nunca se sabe...)

Aunque últimamente ese ruido tan "relajante", lo estoy escuchando con los ojos bien abiertos, un vaso de café (agua caliente, cucharada colmada de nescafé y bien de azucar.. forma rápida y eficaz de prepararte un "bombón de café" que te mantenga despierto) y un curso que estoy devorando como si de un libro de mesilla se tratase...

El sueño "medio-oriental" no está descartado del todo (nunca se sabe cuando se puede producir un punto de inflexión que te haga mandarlo todo lejos e irte a un lugar tan extraño) y de ahí mis noches en vela... Aunque si bien he de decir, que mucho más cercano y más real está el acercamiento al oeste, que ya llevo gestando un tiempo... Lo único que tengo claro es que abandono la "academia"... No siento que me pueda aportar nada... No hay más que ver qué hago en mi tiempo libre.. ahí queda la prepotencia.. y a mucha honra... La decepción ha sido grande, inmensa, rotunda, mayúscula, excepcional...

Por cierto... hablando de academias, ayer vi un rato de OT (negaré haber escrito esto... a partir de ahora, esta frase habrá sido un error de Blogger)... En fin... un vodevil casi perfecto... "Artistas" que insultan a sus profesores, presentadores que discuten con sus "presentados", etc.. En fin... me soprendió ver que ya les llaman a la cara "productos".. Hay algunos que no tienen dignidad y con tal de tener su minuto de gloria, se dejan hacer... Sinceramente, me dan lástima...

La verdad es que últimamente me encuentro en un estado de pesimismo bastante lamentable... pero tengo todavía mis ratos estúpidamente alegres... Así, esta mañana según iba a trabajar, fui pensando en las cosas que me gustan

- El olor a recién regado
- El frío de una mañana veraniega, con el cielo completamente azul.. mientras en tu mente prevees el calor del mediodía...
- Despertarme por la noche y calcular las horas que aún quedan por dormir
- Beber agua
- Tocar la guitarra
- Acordarme, como por casualidad, de esa canción, que durante un tiempo significó algo
- El camino de vuelta a casa un viernes de madrugada
- Viajar
- Tú, yo, nosotros, vosotros...
- Las dudas (sí.. en el fondo son divertidas)
- Quedarme dormido con un libro en las manos
- Algunas noches...
- Algunos días...
- Reírme... y con razones para ello
... (otro día podría seguir)

P.d: Por cierto, tras cruzarme día sí, día también con una misma persona, ésta, en puro acto reflejo, me ha lanzado hoy un saludo acompañado de un "Uy! Perdón!" al darse cuenta de ello... Hoy simplemente reaccioné con una risa... Mañana saludaré yo.. Faltaría más... pedir perdón por saludar... Aunque parezca una tontería son detalles que alegran el día... Si al final va a ser verdad que el ser humano es sencillo, sencillo...